Queridos hermanos: 17 años nos parece poco, pero en realidad son 17 años en que hemos descubierto las huellas de la presencia del Señor, y la materna protección de Santa Ana y Madre Rosa que no cesan de acompañarnos en esta aventura de amor.
Un 8 de diciembre de l866, con la vestición de las primeras cinco compañeras, Madre Rosa daba oficialmente inicio a la fundación de Instituto de las Hijas de Santa Ana. Después de doce años de fundación, con la audacia intrépida de la fe, Madre Rosa mandaba a Bolivia, el primer grupo de Hijas de Santa Ana. Y simultáneamente en la oración y en el pensamiento de Madre Rosa madura la idea de fundar la rama masculina, que participen del mismo carisma, y que podrían ofrecer a las Hijas de Santa Ana un apoyo espiritual idónea y segura.
Ya en 1879 se había abierto en Nápoles la comunidad de las Hijas de Santa Ana; el Arzobispo Card. Sanfelice, en común acuerdo con la Madre le confía la asistencia espiritual a su joven secretario Don Genaro Granito de Belmonte; con el tiempo nacerá entre ambos, una relación reciproca espiritual y paterna-materna, de la cual madura la idea de la fundación de los Hijos de Santa Ana: “Como mi Bien va preparando a los Hijos de Santa Ana es una cosa grande y extraordinaria”. La persona indicada, para dar inicio a esta nueva obra, parece ser Don Genaro de Belmonte. La Madre, sentía fuerte la inspiración esta inspiración. “… tu mi Bien, guía la pluma, sugiéreme, que prontamente serán escritas y con tu potentísimo gobierno serán observadas, estos también serán los Hijos del corazón de la Madre Santa Ana y fieles cooperadores de su viña”. ¡Oh, sueño feliz!
Este sueño de la Rosa no pudo concretizarse, parece que el tiempo todavía no era propicio. Tanto don Genaro como Madre supieron aceptar serenamente esta realidad. Madre Rosa murió el 06 de mayo de 1900 sin haber hecho realidad este proyecto de los Hijos de Santa Ana.
La celebración del XVIII Capítulo General de las Hijas de santa Ana (1990 – 1991) abre el camino a una renovación general de la espiritualidad específica de las Hijas de Santa Ana. En dicho Capítulo será acogida formalmente la propuesta de dar inicio a una nueva expresión del carisma con rostro masculino. Cómo es la providencia, porque Será el mismo Cardenal Camilo Ruini, Vicario de su Santidad que, en un providencial encuentro con Madre Virginia le propondrá que la formación de los jóvenes tenga inicio en Roma. Y es así que El Cardenal Vicario concede la aprobación el 26 de Mayo de 1993 con el siguiente decreto “DECRETO la aprobación en la Diócesis de Roma de la Asociación Publica de Fieles denominada “Hijos de Santa Ana”, y la aprobación del Estatuto alegado. Seguidamente vendrá la elección, de un Superior doméstico que recae en Patricio Moraleda, que será el responsable por la vida interna de la comunidad.
Han pasado muchas cosas desde aquel 26 de Mayo de 1993 hasta hoy: Apertura de las comunidades en la Parroquieta (Roma), en Brasil, Perú, Kenia, Bolivia, Filipinas; hechos que representan un signo de confianza que toda la familia Religiosa, en la persona de la Madre y de su Consejo, depositan en los Hijos de Santa Ana. Enero 2007 I Asamblea General de los Hijos de Santa Ana, donde Padre Manuel Gonsalo Agostinho fue electo como Responsable Mayor; enero de 2010, II Asamblea General, donde Padre Valdo Feitosa fue electo como Responsable Mayor y su consejo conformado por Padre Adelio Pedro Joao y Padre Martin Villanueva. Son eventos que tenemos que saber leer bajo la óptica de la fe y a la luz del deseo que en los siglos pasados estimuló a Madre Rosa Gattorno a llevar adelante la Obra que el Señor le inspiraba. Nuestra comunión carismática de Hijas e Hijos de la Santa Madre Ana, tiene que ser en la Iglesia el sello de la presencia misericordiosa y actuante de Dios que provee a las necesidades de la humanidad, que no se olvida jamás de su pueblo.
Feliz 17° Aniversario queridos hermanos.
Con afecto fraterno:
p. Martin hsa